Aunque durante décadas la industria minera y su cadena de valor han estado lideradas principalmente por hombres, hoy en sede Antofagasta, Amaya está escribiendo una nueva historia. Una que busca derribar paradigmas e inspirar a más mujeres a integrarse, aportar y abrirse camino en este desafiante y valioso sector productivo.
Si bien no fue fácil decidir qué carrera estudiar, hoy su camino ha tomado un rumbo esperanzador , como la propia estudiante lo describe. Al principio, los prejuicios y el desconocimiento sobre este nuevo mundo le generaban dudas. Sin embargo, gracias al apoyo de sus profesores y compañeros, hoy Amaya define su presente como “la mejor decisión que pude haber tomado” .
“Inicialmente quería estudiar otra carrera, totalmente diferente. Conocí de Ceduc UCN en una de sus ferias vocacionales y ahí descubrí Mantenimiento Industrial y Mecatrónica y me encantó. Luego de pensarlo, decidí arriesgarme, a pesar de saber que la minería ha sido históricamente un mundo de hombres. Tenía los miedos normales, pero todo eso se derrumbó cuando vi que aquí me recibieron y valoraron como a una más”,
Así como Amaya está rompiendo esquemas, espera que más mujeres se animen a explorar el mundo de la minería y, en particular, su carrera. De hecho este año ingresaron 8 mujeres a estudiar la carrera en sede Antofagasta. “Mi profesión no es sólo fuerza ni algo para hombres. Aquí puedes aprender sobre tecnología, automatización, mantenimiento industrial, prevención, inteligencia artificial… cosas que no tienen género, sino que depende de las ganas y el compromiso de cada uno. Y yo tengo ambas”.
Actualmente, Amaya Lamadrid Valdenegro cursa su segundo año en modalidad diurna en sede Antofagasta , donde espera seguir creciendo con el constante apoyo de sus compañeros, docentes y su padre, quien ha trabajado por décadas en el rubro minero e industrial, y hoy es uno de sus principales consejeros y guías.